8 de marzo

Exageradas nos dicen, que solo buscamos atención porque seguro, hoy no nos atendieron bien. Toda feminista está mal de la cabeza les gusta decir, para tapar su orgullo de macho y desechar lo que verdaderamente está pasando, nos están matando.
Exageradas nos dicen, nos tapan con chistes, nos denigran y nos tachan de "feminazi" en cada burla, curiosa palabra, que nos compara con dictador, macho y genocida, algo que no cuadra bien y estoy segura que es al revés.
Exageradas nos dicen, a nosotras que tenemos que andar buscando respeto e igualdad, ya que parece que si sos mujer, no lo mereces.
Exageradas nos dicen y nos quieren hacer creer que no es tan así, que seguro algo hizo para que la maten, "seguro era su ropa, seguro ella lo provoco".
Exageradas nos dicen, a nosotras, que nos matan cada 23hs. A nosotras, a las que nos da miedo salir a la calle porque sabemos que nos van a humillar, acosar o es posible que hoy nos toque las desdicha y nos volvamos un número más, un femicidio más.
Exageradas nos dicen, pero no ven que hoy estamos más lúcidas que nunca, que ya no hay vuelta atrás, que ya no nos van a tapar más.

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Arde con cada verso, brota con cada palabra. Voltearla sobre papel es desesperante, apasionante, es eternamente liberador. Efímera e incontrolable, inalcanzable de apagar, como quien la escribe, arde.

Me gustan

Me gustan las cosas inesperadas, como saltar canales, encontrarme con Harry Potter, o los Simpsons, un domingo. Esos momentos, cuando me cocinan, o un bebé se ríe, por una mueca que hice. Me gustan las cosas inesperadas, como ir por la calle, encontrarme con tu perfume, la lluvia en un día soleado, o como esos versos, que salen de noche, y terminan en un poema, lleno de gracia.

🌬 Sobre el olvido

Salgo de la ducha e inevitablemente me siento en la cama a observar por la ventana, me gusta ver la vida pasar, la lluvia caer. El día está triste una vez más, queriendo llorar pero solo derramando una suave llovizna, que moja pero no mucho, queriendo desahogarse pero sin poder lograrlo, queriendo olvidar pero no es tan fácil como la pintan. Los recuerdos comienzan a caer en mi mente como las gotas de lluvia en la ventana, demasiado fuerte. Sueño con tu olor, tus abrazos y caricias, con cada momento vivido, con el principio y el final. La cabeza se me dispara, intento olvidarte, juro que si, pero no lo controlo. Las lágrimas empiezan a caer al ritmo de la lluvia y recordando cada minuto, supe que sin aquello no sería la persona que hoy soy, porque entre besos y momentos nos enseñamos tanto, porque me mostraste como sentir el instante, a no forzar y estirar las cosas que, a fin de cuentas, pueden dañar, porque los destellos en algún momento se desvanecen, la lluvia siem...

Así andábamos

Andábamos sin buscarnos a miles de dimensiones de distancia. Allí donde el tiempo se petrifica pero el mundo sigue su constante andar. Andábamos sin buscarnos queriendo sentirnos, vivirnos, queriendo sentir la piel erizada y el corazón febril. Andábamos sin buscarnos y nos vimos caminando entre sabanas para encontrarnos, buscando palabras en un idioma que no forma parte de las lenguas habladas. Nos encontramos con las piernas enlazadas, suspirando en cada beso. Deteniendo el reloj, entre miradas, tus labios recogían cada letra que de mi boca brotaba, culpando a tus suaves dedos inquietos que jugaban. Andábamos sin sabernos, sin jugarnos, sin vivirnos, así andábamos.

Te siento

Te veo, te veo y no puedo dejar de verte, te veo en las primeras silabas alargadas de un nuevo amanecer. Te veo bajo el cielo estrellado, durmiendo a mi lado, te veo frente a mi con tus cálidos ojos cafés, siguiéndome. Te veo en el quieto lago, recostado y alejado, en el mar y sus olas, en la música que bailas y cantas, a tu propio compás, libre. Te veo recogiendo los versos que brotan de mis labios, te veo saciado, riendo, en mis escritos, en el arte. Te veo, te veo y no puedo dejar de verte.

✨ Crepúsculo

Bailemos bajo el caer del sol, bajo los primeros soles de verano, donde los cuerpos se mecen y las almas florecen. Bailemos con trago en mano, que las sombras desaparecen y toda la tierra conspira, cuando la luna aparece y nos mira. Bailemos con el susurrar del viento, que nos acaricia el cuerpo, nos desnuda un poco el alma y nos deja sin aliento. Bailemos bajo la luna que nos mira, sobre la arena que abraza nuestros pies, la fogata que nos regala calidez, y las sonrisas de amigos, que nos llevan a bailar una y otra vez.

Parloteo

Puede ser que cuando hablamos de amor, hablemos de blancos o negros , de estructuras, de libertad, reglas, es así o asa, aunque no tenga ni siquiera grises, porque no es teoría, porque simplemente es, es y esta de muchas formas . Porque aprendemos a amar de muchas maneras, sin mucha explicación. Porque c omo se explica esto que no es, que se siente, que siento cuando escucho desde el dormitorio, clarito, la cuchara golpear las paredes de la taza llena de café que batís , solo porque a mi me gusta así. Y aun no se explicar lo que me pasa desde que te vi mirando el cielo estrellado, infinito y perdido que comenzaba en tus ojos. Como les enseño la electricidad que me eriza la piel cuando la sombra de tus carcajadas trepan hasta el techo cada vez que te hago reír, que me haces cosquillas y reís, reís cuando mis dedos ansiosos trepan hasta tu nariz, bajan hasta tu boca, inquietos ruedan torpemente aferrándose a todo tu cuerpo, aferrándome . Como explicar lo que siento cuando t...

Olvido

He querido enterrar el amor en una vacía y desnuda cueva, en un deshabitado y lejano bosque, en lo más alto y hondo de la montaña para que nadie lo busque, para que nadie lo atañe. No pondré flores en su rostro, sus hermosos labios permanecerán sellados, no le haré un gran altar, para que quede en el olvido y nadie le vaya a orar. No volveré, pues la cueva es fría, el bosque es desierto y al pensar en la montaña, de mi se apodera el miedo. Pero en las noches oraré por ti, cuando el viento sople y me envuelvan los recuerdos, lloraré por ti, cuando no haya nadie que pueda mirar, te miraré, mi amor.

3 a.m

Le dije adiós tantas veces, que se convirtió en una forma de saludo. Le dije adiós tantas veces que la sonrisa se me hacía en los costados de la calma y de la dicha, de un día siguiente. Le dije adiós tantas veces, que lo creí en el pasado. Le dije adiós tantas veces que cuando todo realmente termino, yo, nisiquiera me despedí.

Creencias.

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