Creencias.

  Me gustan las cosas inesperadas, como saltar canales, encontrarme con Harry Potter,  o los Simpsons,  un domingo. Esos momentos, cuando me cocinan, o un bebé se ríe, por una mueca que hice. Me gustan las cosas inesperadas, como ir por la calle, encontrarme con tu perfume, la lluvia en un día soleado,  o como esos versos, que salen de noche, y terminan en un poema, lleno de gracia.

  Andábamos sin buscarnos a miles de dimensiones de distancia. Allí donde el tiempo se petrifica pero el mundo sigue su constante andar. Andábamos sin buscarnos queriendo sentirnos, vivirnos, queriendo sentir la piel erizada y el corazón febril.  Andábamos sin buscarnos y nos vimos caminando entre sabanas para encontrarnos, buscando palabras en un idioma que no forma parte de las lenguas habladas. Nos encontramos con las piernas enlazadas, suspirando en cada beso. Deteniendo el reloj, entre miradas,  tus labios recogían cada letra que de mi boca brotaba, culpando a tus suaves dedos inquietos que jugaban. Andábamos sin sabernos, sin jugarnos, sin vivirnos, así andábamos.

Te veo, te veo y no puedo dejar de verte, te veo en las primeras silabas alargadas  de un nuevo amanecer. Te veo bajo el cielo estrellado, durmiendo a mi lado, te veo frente a mi con tus cálidos ojos cafés, siguiéndome. Te veo en el quieto lago, recostado y alejado, en el mar y sus olas, en la música que bailas y cantas, a tu propio compás, libre. Te veo recogiendo los versos que brotan de mis labios, te veo saciado, riendo, en mis escritos, en el arte. Te veo, te veo y no puedo dejar de verte.

 Bailemos bajo el caer del sol, bajo los primeros soles de verano, donde los cuerpos se mecen y las almas florecen. Bailemos con trago en mano, que las sombras desaparecen  y toda la tierra conspira, cuando la luna aparece y nos mira. Bailemos con el susurrar del viento, que nos acaricia el cuerpo, nos desnuda un poco el alma y nos deja sin aliento. Bailemos bajo la luna que nos mira, sobre la arena que abraza nuestros pies, la fogata que nos regala calidez, y las sonrisas de amigos, que nos llevan a bailar una y otra vez.

Exageradas nos dicen, que solo buscamos atención porque seguro, hoy no nos atendieron bien. Toda feminista está mal de la cabeza les gusta decir, para tapar su orgullo de macho y desechar lo que verdaderamente está pasando, nos están matando. Exageradas nos dicen, nos tapan con chistes, nos denigran y nos tachan de "feminazi" en cada burla, curiosa palabra, que nos compara con dictador, macho y genocida, algo que no cuadra bien y estoy segura que es al revés. Exageradas nos dicen, a nosotras que tenemos que andar buscando respeto e igualdad, ya que parece que si sos mujer, no lo mereces. Exageradas nos dicen y nos quieren hacer creer que no es tan así, que seguro algo hizo para que la maten, "seguro era su ropa, seguro ella lo provoco". Exageradas nos dicen, a nosotras, que nos matan cada 23hs. A nosotras, a las que nos da miedo salir a la calle porque sabemos que nos van a humillar, acosar o es posible que hoy nos toque las desdicha y nos volvamos un número má